Correr a Cristo en Cuasimodo
El fin de semana siguiente a Semana Santa se celebra el Cuasimodo, una de las expresiones de religiosidad popular característica de la zona central de Chile.
El fin de semana siguiente a Semana Santa se celebra el Cuasimodo, una de las expresiones de religiosidad popular característica de la zona central de Chile.
Esta tradición religiosa se remonta a la época de la Colonia, cuando los sacerdotes llevaban la comunión a los enfermos y ancianos que tenían dificultades para asistir a la iglesia, sobre todo durante la Pascua de Resurrección. Como frecuentemente los religiosos eran asaltados en los caminos rurales, los campesinos empezaron a protegerlos de este peligro convirtiéndose en sus acompañantes, así surgieron los cuasimodistas.
Esta procesión de huasos es denominada "correr a Cristo", por la costumbre de cabalgar junto a la carroza que lleva al eclesiástico con imágenes religiosas y los símbolos del sacramento.
Una fiel devota de esta fiesta es Clemira Montenegro, vecina de Lo Barnechea y miembro de la Asociación Nacional de Cuasimodistas, quien recuerda que "corrió" por primera vez en esta fiesta cuando sólo tenía 12 años: "De repente mi mamá nos traía a verlo, era mi alegría, el Cuasimodo era todo (...) en una ocasión me vine con mi abuelita y me conseguí un caballo, ahí corrí la primera vez. Entonces, siempre he tenido esas ansias de saber más de mis raíces, mi cultura", señala.
El interés de Clemira por esta fiesta la impulsó a investigar sus orígenes y conocer esta tradición que es "una fiesta religiosa única de Chile, única en el mundo. En Lo Barnechea yo tengo antecedentes que se celebra desde 1896 más o menos, en ese tiempo se corrían unas 7 leguas para acompañar al santísimo", relata.
El Cuasimodo es una fiesta llena de colorido, donde desfila una caravana de caballos, bicicletas, coches y carretelas, especialmente decorados para la ocasión. A estos ornamentos se suman los atuendos característicos de los cuasimodistas, los que acostumbran usar pañuelos de diversos colores y una capa corta denominada esclavina, adornada con figuras sacras, lemas religiosos o imágenes relacionadas al mundo rural.
En esta colección destacamos la importancia de esta celebración religiosa a través de imágenes, documentos y testimonios recopilados en Pudahuel y Lo Barnechea, los que reflejan las características de esta fiesta cargada de fe y tradición.