Sindicato de trabajadores de la construcción: solidaridad y memoria
Experiencias de organización y luchas vividas desde mediados del siglo XX cuenta esta historia sobre el Sindicato de Trabajadores de la Construcción, Excavadores y Alcantarilleros.
Experiencias de organización y luchas vividas desde mediados del siglo XX cuenta esta historia sobre el Sindicato de Trabajadores de la Construcción, Excavadores y Alcantarilleros.
Protagonistas de las principales transformaciones urbanas, estos trabajadores de la construcción son quienes levantaron obras públicas,ampliaron la red de alcantarillado y abastecieron de agua potable a las poblaciones de la periferia. Alcantarilleros y excavadores, hoy jubilados, cuentan sus experiencias como constructores de la ciudad en oficios que hoy están en desuso, debido a la tecnologización del proceso constructivo.
Muchos de ellos eran migrantes provenientes del campo y llegaron a mediados de siglo pasado hasta Santiago para convertirse en obreros de la construcción. Las condiciones laborales, las enfermedades asociadas y la cesantía, los impulsaron a conformar un sindicato que "surgió para hacer frente a las muchas necesidades de los trabajadores", como señala uno de sus socios. De ahí surgen historias de solidaridad entre compañeros, las huelgas, las tomas de obras y los pliegos de petitorios.
Organización y unión que logró momentos destacados en la historia de los trabajadores, como la construcción en tiempo record del edificio de la UNCTAD III- hito urbano que cruza nuestra historia reciente y que hoy es el Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM)- y la huelga de Colbún- Machicura (1982-1983), una de las primeras paralizaciones durante la dictadura y con posterioridad a la implantación del Plan Laboral que reemplazó al anterior Código del Trabajo, vigente hasta 1973.
A lo largo de la historia de este sindicato, cabe mencionar el período de apogeo de la agrupación cuando "llegó a contar con más de 3.000 socios durante la Unidad Popular"; la importante labor de algunos dirigentes, como Héctor “El Loco” Cuevas; el drástico quiebre que significó el golpe de Estado de 1973; la resistencia sindical y de otros sectores de la sociedad a la dictadura; y el velorio y funeral de Raúl Pellegrin, dirigente del Frente Patriótico Manuel Rodríguez asesinado a fines de los años ochenta, y cuyo cuerpo fue velado en la sede sindical.
Este espacio, ubicado en Serrano # 444, fue de gran importancia para la rearticulación de las organizaciones del movimiento sindical, social y popular, entre ellas la Confederación Nacional de Trabajadores de la Construcción, la organización metropolitana de pobladores, y diversas agrupaciones juveniles y culturales.
Fotografías, documentos y testimonios
¿Qué recordamos de nuestro sindicato?, ¿qué personas y procesos han sido significativos para nuestra organización? y ¿cuál es la importancia de nuestra sede sindical? Son algunas de las interrogantes que surgieron en diversos encuentros de memoria y a través de la donación de fotografías y documentos.
Este material fue recopilado en un intenso proceso realizado por Memorias del Siglo XX con los socios y dirigentes del sindicato, sus familiares y amigos, durante los años 2016-2017. Este trabajo comenzó con el propósito de contribuir al expediente técnico presentado al Consejo de Monumentos Nacionales, en virtud de la declaración de la sede sindical de Serrano #444, como Monumento Histórico Nacional.
La periodicidad de los encuentros de memoria, así como el proceso de recopilación de fotografías y documentos, permitió profundizar algunas temáticas y recuerdos, entre ellos, los recuerdos del gobierno de la Unidad Popular y su relación con los trabajadores y la resistencia a la dictadura militar mediante protestas y múltiples manifestaciones de solidaridad.
Fotografías, testimonios y documentos presentes en esta colección, dan cuenta de diversas experiencias en la historia del Sindicato de Trabajadores de la Construcción, Excavadores y Alcantarilleros, la Confederación Nacional de Trabajadores de la Construcción y el Centro Cultural Héctor Cuevas Salvador.
Entre las fotografías se pueden observar a los trabajadores en obras de excavación, alcantarillado y construcción. También hay decenas de imágenes y documentos relativos a la organización durante la dictadura cívico-militar. Por último, hay un grupo de fotografías que dan cuenta de los años recientes del sindicato, la persistencia de su organización y la nueva valoración de ella, en virtud de la declaratoria de su emblemática sede como Monumento Histórico Nacional.
Este material es parte de la exposición "Memoria profunda: constructores del movimiento sindical", que se exhibe en el Museo Histórico Nacional desde diciembre del año 2017 a marzo del año 2018.